El método más importante para reducir el CO2 en la industria del petróleo y el gas es la captura del dióxido de carbono y su transporte por gasoductos o barcos. En el futuro, cada vez más tuberías no transportarán únicamente gas, sino también hidrógeno. SICK ofrece una amplia gama de productos para el análisis de gases y la medición de caudal.
Hoy es el turno de la segunda parte de nuestra serie sobre descarbonización centrada en la industria del petróleo y el gas
El CCUS es actualmente uno de los métodos más eficaces para reducir o incluso eliminar las emisiones de CO2 en el sector de la producción y el transporte de gas. El dióxido de carbono puede capturarse de diversas fuentes de emisión, recogerse y transportarse a través de tuberías o buques para su posterior procesamiento, como su almacenamiento o utilización.
Con el método de "captura directa del aire", el dióxido de carbono también se extrae directamente del aire. Es necesario medir el flujo de gas en cada ubicación de entrega para controlar o facturar la cantidad de CO2 capturado, el volumen almacenado o la transferencia a otras empresas para su utilización. La medición precisa del gas con el sistema de medición de caudales FLOWSKID permite una facturación precisa y fiscal con las empresas o el cálculo de los impuestos y créditos de CO2.
Independientemente del destino del CO2 capturado (almacenamiento o utilización), es importante medir y controlar la calidad del gas y las impurezas que pueda contener. Las impurezas pueden tener un impacto negativo en los pasos y procesos posteriores de la distribución del CO2. SICK ofrece diversas tecnologías para ello, desde soluciones de medición extractiva hasta mediciones in situ. Los analizadores de gases extractivos GMS800 y las soluciones CEMS MCS200HW o MCS300P HW miden la calidad y pureza del CO2. Además, el analizador de gases in situ GM35 mide la concentración de CO2. El caudalímetro de gas FLOWSIC600-XT determina el caudal exacto de gas.
SICK también ofrece diversas soluciones digitales y de procesamiento de datos, como el software de configuración FLOWgate e i-diagnostics™ para suministrar datos sobre el estado de los dispositivos. La Monitoring Box se utiliza para el procesamiento analítico de los datos de estado y aplicación.
La generación de energía renovable y su almacenamiento mediante tecnologías limpias y eficientes desde el punto de vista energético es un elemento fundamental para el futuro del suministro energético. La conversión de electricidad procedente de turbinas eólicas u otras fuentes de energía respetuosas con el medio ambiente en hidrógeno (por ejemplo, mediante electrólisis) desempeña un papel importante en este sentido. Solo así es posible almacenar la energía de forma eficiente o transportarla a grandes distancias.
Además, cada vez más clientes quieren inyectar el hidrógeno en la red de gas para reducir las emisiones de CO2 cuando la mezcla de gases se utilice después, por ejemplo, en turbinas de gas. Es previsible que esta tecnología se popularice cada vez más en los próximos años; pronto se introducirá más de un 20 % de hidrógeno en las redes de gas. Esta alimentación plantea importantes retos y cuestiones a la industria, como la medición del caudal fiable y la calidad del hidrógeno.
Los caudalímetros de gas de SICK ya lo ofrecen hoy en día, puesto que el FLOWSIC600-XT, por ejemplo, mide la concentración de H2 en el gas natural.
Más información en la primera parte de nuestra serie sobre descarbonización
