Cada vez un número mayor de vehículos usa motor eléctrico en vez de motor de combustión, cada vez más “inteligencia”: los desarrollos en el área de la movilidad eléctrica tienen efectos masivos en la industria. Se demandan nuevos conceptos y procesos de producción no solo a los fabricantes y proveedores de automóviles, también a los sectores de máquinas herramienta, de sistemas de manipulación y montaje o de producción de baterías.
Además de áreas consolidadas tales como el equipamiento interior, los neumáticos o la fabricación de carrocerías, los fabricantes y los proveedores de automóviles deben adquirir nuevos conocimientos y capacidades, ya que nuevos componentes como baterías de alto rendimiento, motores eléctricos y la electrónica de potencia asociada se abren paso en los vehículos y deben producirse y montarse con un alto grado de automatización. Al mismo tiempo, crece el número y la variedad de componentes en el vehículo. Y este mayor número de componentes y elementos implica también la necesidad de detectar, inspeccionar e identificar con fiabilidad un mayor número de ellos.
Demanda de eficiencia y elevada calidad de proceso:
Gestionar diferentes componentes con flexibilidad:
Sencillez y seguridad para una mayor productividad:
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Logística de producción inteligente
El círculo se cierra: soluciones de sensores en la logística de producción, incluso para los más pequeños espacios en la producción
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