El crecimiento que el sector logístico ha experimentado en los últimos años trae consigo la necesidad de implementar nuevos sistemas de automatización , capaces de gestionar de manera cada vez más eficiente los flujos de mercancías en constante aumento, tanto los que entran y los que salen de los almacenes como los que están dentro de los lugares de trabajo.
En este contexto, la identificación automática , o autoID , asume un papel crucial en los procesos operativos, logísticos y de intralogística . Con este término se hace referencia a la identificación de productos , así como de equipos, maquinaria y personas, a través de un sistema de decodificación de un código .
Se trata de una tecnología que soporta las operaciones de reconocimiento y permite a las empresas a firmar de manera unívoca una identidad a cada producto durante el proceso de producción, facilitando su trazabilidad y rastreo a lo largo de toda la cadena de suministro y haciendo posible el monitoreo. y la gestión optimizada del flujo de materias primas, componentes y productos terminados.
Hoy en día, el desarrollo de las tecnologías asociadas a la identificación automática ha potenciado los resultados hasta el punto de que para una compañía sería impensable prescindir de ellas en la gestión de la actividad logística.
Los sistemas de identificación automática , como los lectores de códigos 1D/2D y RFID , son tecnologías probadas e indispensables para el control de los procesos de producción industrial y de los flujos logísticos . De hecho, es la capacidad de gestionar los flujos de mercancías de la manera más precisa y eficiente posible lo que define la competitividad de una plataforma logística .
Los datos del mercado lo confirman: el tamaño del mercado global (https://www.expertmarketresearch.com/reports/automatic-identification-and-data-capture-market ) de la identificación automática y adquisición de datos (AIDC, por sus siglas en inglés) ha alcanzado aproximadamente los 56,44 mil millones de dólares en 2023 . Además, se prevé un crecimiento con una CAGR (tasa de crecimiento anual compuesta) del 12 % entre 2024 y 2032, hasta alcanzar un valor de aproximadamente 158, 89 mil millones de dólares hasta 2032 .